Las isapre han comenzado a pagar la deuda generada por los cobros ilegales que realizaron durante años. La fórmula de devolución ha generado molestia transversal, principalmente porque se proponen pagos de pequeñas cuotas que se extienden hasta por 13 años y porque, en muchos casos, existieron alzas en los precios de los planes mayores a los montos devueltos. Ante esta situación y de manera inescrupulosa, la oposición ha buscado culpables sin asumir que fueron ellos los principales defensores de la fórmula propuesta, bajo la amenaza de que sin un salvataje a las isapre se pondría en riesgo la viabilidad financiera de muchos prestadores privados, generando un colapso del sistema de salud.
Aprovechándose de esa amenaza, empujaron condiciones más y más favorables para las isapre, en desmedro de los usuarios. Y aunque fracasaron en el intento de disminuir el monto de la deuda (bajo el eufemismo de "mutualización") fueron exitosos en lograr extender el periodo de devolución.
Esta situación devela una vieja y clara estrategia seguida por quienes concentran el poder económico en Chile: Utilizan su poder en distintas esferas para defender sus intereses muchas veces contrapuestos a los de las mayorías y luego, cuando las consecuencias de ello quedan manifiestas, buscan culpar a las instituciones políticas en general. Un actor clave dentro de esta estrategia son quienes en la discusión política defienden los intereses de las élites económicas, rechazando cualquier cambio que vaya en contra de sus intereses y luego vociferando para difuminar sus responsabilidades. Así logran mantener el statu quo que los favorece y redirigen el malestar que ello provoca hacia quienes intentan generar cambios pero no logran vencer la oposición férrea que ellos mismos realizan.
Riesgo similar se observa en la discusión de pensiones. La Asociación de AFP ha desplegado un lobby y campaña comunicacional agresiva para defender su "gallina de los huevos de oro", donde obtienen grandes utilidades con un bajísimo riesgo. Así, buscan que el 6% de cotización adicional vaya íntegramente a capitalización individual, fortaleciendo su negocio. No es de extrañar que gran parte de la oposición en el Congreso defienda justamente los mismos postulados que los dueños de las AFP, buscando reducir cualquier expresión de seguridad social en el sistema. De prosperar esas ideas, seguramente existirá indignación transversal al ver que las pensiones de las personas mayores no mejoran hoy pero sí lo hacen las utilidades de las AFP. Y nuevamente aplicarán la estrategia de culpar a otros, al Gobierno, al Congreso, analistas dirán que la política no estuvo a la altura y así, ocultaran que han cumplido con el propósito de frenar los cambios y de defender los intereses de unos pocos en desmedro de lograr avances sociales que beneficien a las mayorías.
Sabemos que lograr cambios sociales en Chile no es fácil, sobre todo si éstos afectan los intereses de quienes concentran gran parte de la riqueza en nuestro país. Son procesos de largo aliento donde no basta sólo con la voluntad de un gobierno. Por ello, creemos fundamental construir mayorías políticas y sociales amplias con el objetivo de seguir empujando la conquista de derechos y la dignidad para todas y todos La sociedad chilena demanda y necesita cambios y desde el Frente Amplio dedicaremos todos nuestros esfuerzos por construir una mayoría que responda a dicho propósito, desde cada espacio que sea necesario: que avancen los intereses de las mayorías.
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