La implementación de la reforma previsional sigue adelante: a partir de enero de 2026 el sistema incorporará los nuevos y potentes beneficios que contempla la ley. Estos elementos no son sólo ajustes técnicos; introducen solidaridad, una compensación para las mujeres y reconocimiento al esfuerzo de los pensionados. Aquí cabe también señalar que esta norma fue fruto de un acuerdo amplio de diversos partidos en el Congreso; consensos clave a los que debimos llegar por el bien del país y que no son un botín de ningún sector. Más de dos millones de personas por estos dos conceptos son prueba palmaria de lo acertado de buscar acuerdos.
Uno de los ejes de la ley es el debut del "Beneficio por Años Cotizados". Este aporte mensual adicional es la primera señal tangible de que el sistema valora y premia la formalidad laboral. Se traduce en un pago de 0,1 UF por cada 12 meses cotizados, escalando hasta un máximo de 2,5 UF mensuales para quienes acrediten 25 años de cotización o más. Para acceder, se requerirá un mínimo de 10 años de cotización en el caso de las mujeres y 20 años para los hombres, una diferencia que, aunque menor, ya insinúa la corrección de sesgos de género.
En la práctica, este beneficio es un espaldarazo directo a quienes han cumplido rigurosamente con sus cotizaciones.
La reforma incluye otro elemento clave: la "Compensación por Expectativa de Vida" para mujeres es un mecanismo que busca la equidad. Su principio consiste en que si una mujer y un hombre tienen los mismos ahorros, grupo familiar y se pensionan a la misma edad, deben recibir pensiones similares. Históricamente, a las mujeres se les ha castigado por su mayor esperanza de vida. Este beneficio, financiado por el nuevo seguro social, corrige esa anomalía, partiendo con un piso de 0,25 UF mensuales y escalando para cerrar esta brecha. Es, sin duda, un avance histórico en la búsqueda de la equidad previsional.
Junto a estos nuevos aportes, la reforma profundiza el legado previsional del expresidente Sebastián Piñera, contemplando el aumento gradual de la Pensión Garantizada Universal (PGU hasta alcanzar los 250.000 pesos.
La entrada en vigor de estos cambios en enero de 2026 simboliza el cumplimiento de anhelos y el fortalecimiento del sistema. Todo esto se puede lograr respetando los ahorros de los trabajadores y la capitalización individual. El éxito de esta etapa inicial dependerá de una implementación eficiente y de la estabilidad política para asegurar la sostenibilidad del sistema.
Desde Facebook:
Guía de uso: Este es un espacio de libertad y por ello te pedimos aprovecharlo, para que tu opinión forme parte del debate público que día a día se da en la red. Esperamos que tus comentarios se den en un ánimo de sana convivencia y respeto, y nos reservamos el derecho de eliminar el contenido que consideremos no apropiado