El agua, junto con ser el elemento esencial para la supervivencia de las especies, es además el centro del desarrollo humano, pues su disponibilidad condiciona el avance de las sociedades, siendo un bien transversal a todas las actividades del hombre, tanto sociales, económicas, como ambientales.
En este sentido, el agua es la clave para el desarrollo sustentable pues, gestionada de manera eficiente y equitativa, puede permitir a las sociedades volverse más resilientes y ser capaces de adaptarse y afrontar los cambios vertiginosos que se experiementan en términos económicos y ambientales, a nivel mundial.
Según Naciones Unidas, la agricultura de regadío y la industria utilizan alrededor de 70% y 24%, respectivamente, del agua usada en todo el mundo, mientras que los hogares utilizan solo el 6%.
Y el escenario se vuelve más complejo, ya que estimaciones indican que, alrededor de dos tercios de la población mundial podría vivir en países con escasez de agua para 2025.
A nivel nacional, el aumento del consumo de agua potable en las últimas décadas se ha tornado preocupante, así como el incremento de la escasez hídrica en más de la mitad del territorio nacional.
A esto se suma el gran volumen de agua que consume el área industrial y productiva, que impacta severamente en la disponibilidad de este recurso en el país. En materia de construcción, por ejemplo, sólo en la operación de la edificación (público, comercial y residencial), se consume alrededor del 6% del total de agua potable a nivel país.
Como ministerio de Vivienda y Urbanismo, en este escenario, nuestra preocupación es desarrollar una construcción más sustentable, que aporte al cuidado del medioambiente, y para ello, trabajamos en incorporar estrategias en la industria relacionadas, entre otros temas, con la gestión eficiente del agua, como el abastecimiento sustentable en zonas no urbanizadas; la reducción del consumo hídrico, tanto al interior de las viviendas como en los espacios abiertos, como jardines y parques donde se privilegia el uso de riego eficiente; la reutilización de aguas grises para fines no potables; el desarrollo de planes de gestión del agua durante la construcción, y sistemas de medición y monitoreo del agua durante la etapa de operación de los proyectos, entre otros.
Esto, con el fin de fomentar un uso eficiente del agua y sentar las bases para los futuros estándares normativos de la edificación en Chile.
Asimismo, hemos desarrollado una serie de iniciativas que apuntan a incorporar este enfoque en los programas habitacionales, creando, por ejemplo, subsidios para apoyar proyectos que consideren la eficiencia energética e hídrica y la reutilización de aguas grises, los que estarán disponibles para la ciudadanía en el corto plazo.
Hemos implementado, además, instrumentos orientados a consolidar políticas para el desarrollo sustentable de las ciudades del país.
Entre estas iniciativas destacan los Estándares de Construcción Sustentable para Viviendas, que buscan mejorar la calidad de las viviendas que se entregan a todos los sectores de la ciudadanía. Este documento incorpora un tomo dedicado a la gestión del agua y a la incorporación de la eficiencia hídrica, entre otros temas.
Con estas iniciativas esperamos educar a la población y colaborar con el desarrollo de políticas públicas orientadas al desarrollo sustentable del país; asimismo, incorporar el tema del cuidado del agua en el sector construcción del país, ayudando con ello a reducir el impacto ambiental generado por el hombre y otorgando una mejor calidad de vida a todos los sectores de la sociedad.
Desde Facebook:
Guía de uso: Este es un espacio de libertad y por ello te pedimos aprovecharlo, para que tu opinión forme parte del debate público que día a día se da en la red. Esperamos que tus comentarios se den en un ánimo de sana convivencia y respeto, y nos reservamos el derecho de eliminar el contenido que consideremos no apropiado