Proteger las fuentes de aguas, por un futuro con seguridad hídrica
Existen diversas definiciones sobre el concepto de seguridad hídrica, pero todas contemplan cuatro dimensiones: Consumo humano, desarrollo económico, preservación de ecosistemas y resiliencia ante amenazas. El desafío es lograr la armonía entre ellas. En nuestro extenso y diverso territorio, identificamos en fuentes superficiales: 1.251 ríos, 26.169 glaciares, 12.784 lagos y lagunas; mientras que en aguas subterráneas hay 725 sectores acuíferos estudiados. Actualmente, la Dirección General de Aguas del MOP dispone de 4.200 estaciones y puntos de monitoreo distribuidos en 101 cuencas a lo largo del país que permiten conocer el estado de nuestras fuentes.
El Código de Aguas, reformado en abril de 2022, prioriza el agua para el consumo humano y establece que las aguas también cumplen con funciones productivas y de preservación ecosistémica, por lo que se debe velar por la armonía y el equilibrio entre dichos usos.
La DGA cuenta con herramientas para asegurar el consumo humano, ya sea entregando autorizaciones temporales, promoviendo acuerdos entre las Juntas de Vigilancia, o bien, declarando reservas de aguas. En esta línea, este año hemos ingresado 14 solicitudes de reserva para este fin a la Contraloría General de la República para distintos sectores ubicados en las regiones de Antofagasta, Maule, Ñuble y Los Lagos.
La DGA, órgano rector en materia de aguas, es la entidad encargada de entregar diversos tipos de autorizaciones, concesiones de derechos de aprovechamiento de aguas, aprobaciones para la construcción de obras hidráulicas, pasando también por autorizar o rechazar traslados y cambios de punto de captación, entre otros, con el compromiso de acelerar y disminuir los tiempos de residencia de las solicitudes presentadas, revisando los procedimientos internos para mejorar dichos procedimientos.
Asimismo, para la preservación ecosistémica, y luego de la incorporación de nuevos antecedentes, esperamos concretar la reserva de caudal en los ríos Futaleufú y Puelo en la Región de Los Lagos, cuyas comunidades se han organizado para garantizar el desarrollo económico sostenible en torno a la recreación, el turismo, la agricultura familiar campesina y la ganadería. Y lo mismo, para iniciar el análisis de reserva en los ríos Yelcho y Palena. En la Región de Los Ríos ingresó a la DGA la solicitud de reserva en el río San Pedro.
Cabe señalar que la DGA puede otorgar un nuevo tipo de derecho de aprovechamiento de aguas para fines no extractivos o también llamado in situ. Esta concesión se puede solicitar específicamente para la conservación ambiental, proyectos de turismo sustentable, recreativo o deportivo y quedarán exentos del pago de patentes por no uso de las aguas. Actualmente, la Contraloría está en el proceso de revisión del reglamento para otorgar este derecho de aprovechamiento y su posterior toma de razón.
Así es como hemos ido aplicando las herramientas que tenemos para proteger las fuentes de aguas superficiales y subterráneas. Sin embargo, la tarea no finaliza allí, puesto que la seguridad hídrica no es una labor exclusiva de la DGA, sino que de todas y todos los actores que habitan las cuencas de nuestro país, tanto públicos como privados.
Es por esto que desde este año se está trabajando en estudios para implementar los Planes Estratégicos de Recursos Hídricos en nueve cuencas, tal como lo establece la reforma al Código de Aguas de 2022, para propiciar la seguridad hídrica en el contexto de las restricciones asociadas al cambio climático. En ochos de estas cuencas, ya están funcionando las Mesas Estratégicas de Recursos Hídricos, conformadas con actores que habitan estas cuencas y que podrán priorizar medidas y acciones que proponga el Plan Estratégico de Recursos Hídricos para hacer frente a las necesidades presentes y futuras del recurso hídrico. Así, cada Mesa Estratégica de Recursos Hídricos ejercerá la gobernanza desde la cuenca, velando por las particularidades y necesidades de su realidad hídrica y territorial.
Estos planes estratégicos se encuentran coordinados con las acciones y medidas del Plan de Adaptación al Cambio Climático en Recursos Hídricos(PACC-RH),el que busca promover la resiliencia de los recursos hídricos a nivel nacional ante los efectos adversos del cambio climático, considerando la disponibilidad de las aguas, la sustentabilidad acuífera y los eventos extremos. Este PACC-RH, ha tenido diversas etapas participativas, desde una consulta temprana, así como talleres presenciales y virtuales, cuyo texto se dispuso para consulta pública y que ya se encuentra en su recta final.
De esta forma, haciendo uso de nuestras facultades y con la participación de la comunidad, vamos avanzando en la protección de las fuentes de aguas superficiales y subterráneas para un futuro con seguridad hídrica.
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