Plan Bío Bío: muchos podemos aportar para los más pobres

Costó mucho ingresar al gimnasio donde fue presentando el esperado plan Bío Bío por parte del presidente Sebastián Piñera. Cerca de una hora demoró la exposición donde se nos explicaron los 8 puntos donde se enfocarán diez mil millones de dólares en los próximos dos años y medio para la región. Reconstrucción, desarrollo productivo, plan Arauco, ciudad y calidad de vida, educación, pobreza, salud y seguridad ciudadana.

Buenas intenciones, grandes proyectos, tremendos desafíos para las autoridades, especialmente para el Intendente que tiene la imposible tarea de terminar con las aldeas antes del próximo invierno.

Hoy en día el principal problema de las actuales movilizaciones sociales del país y de esta región tiene que ver con la desigual distribución de los ingresos.

La diferencia que existe entre las personas que viven en los 170 campamentos, las 83 aldeas y aquél 7,9 % cesante en la región, por poner sólo las cifras más duras, y el resto de la sociedad, incrementa la falta de oportunidades y la indignación social que lleva a las protestas y a la manifestación del malestar de muchos actores sociales.

El mismo Presidente convocó a todos los actores a participar en la articulación de este plan.

¿Qué se echa de menos? Que la solución a los problemas de los más pobres se superan de mejor manera cuando se les da herramientas para que ellos mismos se puedan insertar en el mundo laboral y se puedan vincular de forma más fluida en las redes de protección social.

Uno de los grandes males en un grupo importante de la población de la región ha sido la permanente asignación de subsidios que no permiten la superación de la dependencia entre el Estado y las personas.

Por lo tanto, una buena manera de superar la desigualdad regional y la dependencia a esos subsidios es convocando a todas aquellas instituciones y agrupaciones que trabajan seriamente en la capacitación del emprendimiento popular.

Crear un fondo concursable para que ellas mismas proyecten, ejecuten y evalúen programas de formación y capacitación para los más pobres.

Una de las aristas del problema de los campamentos es que haya mayores recursos para formar dirigentes y líderes que convoquen y lleven a cabo los programas de habilitación y erradicación.

Una de las aristas para superar el problema de la cesantía juvenil es entregarles oficios que les permitan obtener una herramienta donde desenvolverse en el mundo laboral. Una de las formas de superar la pobreza de muchas personas es otorgarles recursos para crear sus pequeños negocios.

Sr. Intendente, ayer quedamos abrumados por lo que le tocará realizar y liderar. El gobierno regional no podrá hacerlo solo. Necesita vincularse a las instituciones sociales, sin fines de lucro, que hacen bien su trabajo y que están cercanas a los más pobres.

Depositar en ellas la confianza para que esos recursos lleguen de verdad a los más vulnerables. Focalizar esos aportes en ellos es una necesidad prioritaria para superar la desigualdad en nuestra región. En la región hay instituciones que hacen bien su trabajo.

Convóquelas, póngale metas y confíe en ellas para trabajar juntos.

Ayer, para llegar a escuchar el plan hubo que presentar dos veces la cédula de identidad y hubo que estar en las listas previamente asignadas.

Ojalá que eso no sea signo de lo que ahora pudiese pasar para aportar buenas ideas que busquen dignificar a los necesitados de nuestra región. Tenemos juntos una gran oportunidad y una gran responsabilidad. Los más pobres no pueden seguir esperando.