¡A jugar hoy el mundial sub 15!
Si duda alguna el fútbol chileno ha reforzado su imagen corporativa con la confirmación de la Copa América 2015. Un gran éxito directivo que mata fantasmas sobre la exclusión de nuestro país del circuito internacional de la FIFA y que avala a un directorio que empezó su gestión con alto descrédito público.
La Copa América en Chile, además, es la oportunidad para que La Roja se instale por primera vez en la galería de países campeones con una generación dorada de futbolistas que van a tener, como muchos creemos, dos mundiales en el cuerpo y probablemente gran actuación en las tierras de Pelé.
Pero la Copa América no será el único acontecimiento deportivo que vivirá nuestro país el año siguiente al Mundial de Brasil.
Habrá un campeonato mundial de jóvenes sub 15 que puede ser el punto de partida para construir la generación del relevo. Para generar un masivo circuito virtuoso que incentive a más jóvenes chilenos a dedicarse a la práctica del fútbol, independiente de que en definitiva opten o no por la carrera de futbolista profesional.
Aprendamos de las lecciones del pasado. No fuimos capaces de entrelazar el Mundial Juvenil del 87 con la Copa América del 91 y si bien la generación del 87 fue la que nos llevó a Francia 98, dejamos pasar muchos años sin aprovechar sistematizadamente su experiencia y condiciones.
Para que los jóvenes del 2015 empiecen a constituirse en los motores del fútbol chileno del futuro, el Mundial Sub 15 hay que empezar a jugarlo desde ya.
Pero no en aquello que leemos como lo más importante para el éxito del mundial. Para no desentonar con los tiempos, las urgencias son los estadios y la infraestructura material y no las personas.
Hay que empezar a jugar el Mundial Sub 15 del 2015 desde hoy y con nuestros niños. Abrir las puertas y ventanas de Pinto Durán y permitir que entre aire fresco para romper el virtual monopolio del fútbol cadetes que, por lo demás, se ha mostrado insuficiente como el revulsivo necesario para el recambio de futbolistas.En efecto, no pocas de las últimas transferencias internacionales de jugadores chilenos son de muchachos que llegaron a los primeros equipos porque fueron descubiertos en torneos escolares, ligas vecinales o realities a edades donde les quedaba poco o nada de tiempo en el fútbol joven.
Hay miles de chilenos que en sus ligas aficionadas muestran extraordinarias condiciones pero que no se integran a las divisiones inferiores de los clubes por razones de estudio, distancia, recursos y otras que son imputables a las debilidades propias de la organización del fútbol cadetes.
Abramos Pinto Durán haciendo jugar a todos los chilenos en edad de competir el 2015.
No importa que en definitiva ninguno de los jóvenes dé la talla técnica, táctica y atlética que exijan los responsables de las selecciones menores.
El sueño mundialista generará en nuestros jóvenes una movilización tanto o más valiosa que la selección misma.
Estaremos sensibilizando y comprometiendo al Chile joven con una gesta deportiva que les pertenece e instalando a los que serán los ídolos deportivos del mañana en la retina de los hinchas del futuro.
Desde Facebook:
Guía de uso: Este es un espacio de libertad y por ello te pedimos aprovecharlo, para que tu opinión forme parte del debate público que día a día se da en la red. Esperamos que tus comentarios se den en un ánimo de sana convivencia y respeto, y nos reservamos el derecho de eliminar el contenido que consideremos no apropiado