TPP11 y compromisos del Gobierno

Andrés Rebolledo Smitmans

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Ayer se aprobó en la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado el TPP11, es una buena noticia en un contexto de guerras comerciales y proteccionismo. Junto con el acuerdo se firmó un protocolo que incluye compromisos por parte del Gobierno para la implementación de programas e instrumentos con el objeto de aprovechar las oportunidades que surgen de este nuevo Acuerdo y, a su vez, es la respuesta a varias dudas y críticas que se han planteado durante el proceso de discusión interna del TPP11 en cuanto al alcance e impacto de distintas disposiciones. 

Este Protocolo contiene elementos muy importantes que recogen antiguas aspiraciones de algunos sectores del país en la implementación de nuestros acuerdos comerciales.

Ratifica que si un nuevo socio tiene interés en participar de este Acuerdo, por ejemplo, Estados Unidos, Corea, China, etc.  sólo se concretaría mediante una nueva negociación y por ende, un nuevo proceso de discusión en nuestro Parlamento.

Se establece que el Acuerdo no tendrá un impacto en el precio de los medicamentos por cuanto no incorpora normas diferentes al estándar ya existente en nuestro ordenamiento interno en materia de propiedad Industrial.

En relación al mecanismo de controversia Inversionista-Estado, el Gobierno se abre a la posibilidad de estudiar nuevos modelos que hoy día se han incorporado en otros acuerdos comerciales y se están promoviendo en diversos países el mundo y que pudieran ser adecuados a nuestra realidad.

Se ratifica la plena vigencia y preeminencia de la ley laboral nacional y que sus eventuales modificaciones para incrementar estándares laborales en el futuro, constituyen atribuciones del Estado que de ninguna forma se ven afectadas por la ratificación del TPP1.  Igualmente, se comprometen a que no se debilitará esta legislación interna con el fin de fomentar el comercio o la inversión.

Se establece el compromiso que en la Ley de implementación del acuerdo internacional relacionado con protección de semillas, UPOV 91, se incorporará: (a) un registro de variedades tradicionales que no podrán ser objeto de propiedad intelectual de ninguna naturaleza, (b) mecanismos para asegurar el intercambio de semillas de variedades tradicionales que se realiza de forma tradicional en distintas partes de nuestro país, y c) un plan que permitirá asociarse a aquellos que tienen bajos volúmenes de producción.

Finalmente, el Gobierno se compromete a que en caso de implementarse el TPP11 en la normativa nacional, en áreas como el acceso al agua, materias territoriales, o asuntos relacionados con conocimientos tradicionales, se realizarán los correspondientes informes de procedencia de consulta indígena, de conformidad a lo previsto en el Convenio 169 de la OIT.  

Durante el primer semestre de vigencia del TPP11 el Gobierno deberá enviar al  Congreso las siguientes propuestas: nuevos métodos de información al Congreso previos y durante las negociaciones de acuerdos comerciales, así como, evaluaciones periódicas de los acuerdos ya vigentes; Plan de Aprovechamiento del TPP11  para las Pymes exportadoras; un programa para impulsar políticas de desarrollo productivo, de diversificación exportadora, formación de RRHH, de mayor recursos para la  innovación y desarrollo, potenciando el desarrollo de las regiones, con el propósito  de mejorar la competitividad y calidad de nuestra inserción internacional con vistas al aprovechamiento del TPP11 y la red de TLCs de Chile.

También, un plan de aprovechamiento de las oportunidades que surgen del TPP11 con relación a las cláusulas de acumulación de origen, para desarrollar sectores y productos de exportación con mayor valor agregado nacional.

Este Protocolo es el resultado de una rico debate en el Parlamento respecto al alcance e impacto del TPP11 y refleja el compromiso de los parlamentarios para acoger las visiones diversas de la sociedad civil y, a su vez, el compromiso del Gobierno para implementar mecanismos que mejoren la implementación del TPP11 y de los acuerdos comerciales en general.

Este mecanismo es un paso adelante en nuestra política comercial y refleja que entramos en una nueva etapa, de mayor transparencia y participación, por lo que, sin duda, constituye un hito y marcará un antes y un después en nuestra política de negociaciones comerciales.