¡Volvamos a jugar! La oportunidad del aire libre

Trinidad Vidal

Ultimos publicados:

• Ciudad y esperanza (de vida)
• Justicia urbana en los Barrios Prioritarios
• La ley de Aportes como desafío municipal y ciudadano

El Covid-19 nos obligó a reinventarnos de todas las formas posibles, a desafiarnos y a probar nuestros límites. El trabajo remoto, exigentes meses de encierro, no tocarnos, no abrazarnos, no salir. Niños y niñas encerrados en sus casas o departamentos, sin ir un año y medio a clases, sin jugar con amigos, sin encontrarse con otros. Es un escenario absolutamente brutal que jamás nos imaginamos, ya que nuestro sistema de cuidados, por ende, el sistema laboral y nuestro modelo de desarrollo, está absolutamente determinado a que los niños y niñas vayan al colegio.

Y esto no ha terminado, si bien hay luz al final del túnel sobre la pandemia, aún muchos niños y niñas no pueden volver a jugar y aprender en sus establecimientos educacionales en distintos lugares del país.

Sin embargo, hoy la ciencia nos puede entregar muchas más certezas, una de ellas es que no hay más alternativa que salir, encontrarnos afuera, valorar el aire libre. En este marco, el Covid-19 nos obligó a resignificar el patio del colegio, a transformarlo en la nueva plaza, a salir de la sala, a ensuciarse, a tener calor y frío. La evidencia científica nos empuja a repensar nuestro sistema educativo y, en ese marco, el patio debiera ser la nueva sala de clases, el lugar más importante de la escuela y no simplemente un espacio para salir a recreo, sino un lugar de aprendizaje, de socialización y de bienestar.

Esto no debiera ser sólo una solución temporal o de emergencia, las enfermedades de invierno y los virus en general bajarán de manera considerable si incorporamos ventilación y uso de los espacios al aire libre en los mínimos escolares.

Los niños y niñas necesitan y merecen volver a jugar tranquilos, los patios de escuelas y colegios son espacios seguros para eso, y son las comunidades educativas junto con las autoridades locales y centrales las invitadas a innovar y re pensar sus espacios al aire libre, para que sean el principal aliado en la salud de la infancia, y con ello, de la salud de todos y todas.