Microplásticos: la contaminación silenciosa e invisible
En los últimos años la sociedad ha tomado conciencia acerca del negativo impacto medioambiental que generan los residuos plásticos (macroplásticos), residuos que en gran medida, aproximadamente 47%, provienen de los envases y embalajes. Esto ha llevado a nivel mundial a la definición de estrategias que permitan transformar la economía lineal, modelo de desarrollo económico actual por una economía circular donde se disminuya el consumo extractivo y se potencie la recircularidad del consumo, poniendo especial énfasis en la "nueva economía de los plásticos".
Sin embargo, poca atención se ha puesto en la contaminación silenciosa causada por los microplásticos, entendiéndose como tal aquellos plásticos con un tamaño inferior a 5 milímetros A fines de mayo, en la reunión global sobre el Tratado de Plásticos de la ONU, que tendrá lugar en París, se tiene una gran oportunidad para establecer medidas globales legalmente vinculantes para abordar este problema.
¿Y porque nos preocupan los microplásticos? Porque se ha calculado que una persona en promedio ingiere 50.000 partículas de microplástico al año, e inhala una cantidad similar. La Comisión Europea ha concluido que la creciente evidencia científica sobre los peligros de la contaminación sobre la salud de los microplásticos requiere un tratamiento legislativo específico.
Aunque hay pocos estudios en humanos, si hay importantes estudios sobre los efectos de los microplásticos en animales, y muchos de estos efectos son los que se esperan encontrar en el organismo humano. Indudablemente los riesgos para la salud humana derivados por microplásticos están asociaos con la exposición específica a los mismos, con los órganos involucrados, así como con la duración de la exposición. Se ha demostrado que la exposición a microplásticos puede alterar la expresión génica, especialmente en los genes involucrados con las funciones inmunes, el metabolismo energético y de desarrollo. Se ha evidenciado como partículas pequeñas pueden atravesar la barrera hematoencefálica y la placenta. En humanos se ha evidenciado como la exposición a microplásticos afecta directamente al tracto gastrointestinal, a los pulmones y al sistema renal provocando irritación, inflamación y desequilibrio de la microbiota intestinal, incremento de riesgo de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, así como insuficiencia renal. Los efectos sobre el sistema reproductivo se encuentran en estudio actualmente.
Los desafíos de equilibrar la conveniencia del uso de plásticos con la posibilidad de causar contaminación por microplásticos son de importancia social. Sin medidas preventivas sólidas e inmediatas los impactos en la salud ambiental de los microplásticos generarían graves problemas a nivel local y mundial. Por lo tanto, existe una necesidad urgente de aumentar la conciencia pública sobre las opciones de consumo e involucrar al público en la minimización de los deshechos plásticos.
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