Las instituciones deben estar construidas en piedra

La situación actual, referida al desprestigio de las instituciones, se debe principalmente a que muchas de ellas no cuentan con las facultades o la independencia para actuar, es decir, no se encuentran construidas en piedra. No basta con que las funciones de las instituciones estén escritas en blanco y negro, ergo, que la confianza de éstas esté respaldada en normas, si finalmente no son sólidas para cumplir con su cometido.

Para ejemplificar todo lo anterior recordemos el caso La Polar, la empresa tenía estados financieros auditados, certificaciones de excelencia emitidas por clasificadoras de riesgo y, además, algunos especialistas levantaron el mito del "gerente de la década", lo que lógicamente volvió perezosos o poco prolijos a los evaluadores de la antigua Superintendencia de Valores y Seguros (SVS), hoy CMF, inversores (principalmente las AFPs) y clasificadoras de riesgos. Ninguno revisó adecuadamente lo que estaba señalado en blanco y negro, y que finalmente mostraba situaciones bien complejas, dejando claro que no se puede confiar en los mitos de súper hombres o mujeres, y las instituciones deben realizar la tarea y fiscalizar adecuadamente a las organizaciones.

Arrastramos en estos años varios hechos de corrupción y falta de cumplimientos normativos, situaciones que han dejado entredicho desde las FF.AA. a Carabineros y la PDI, pasando por instituciones políticas, empresariales y financieras, y recientemente la situación de los "Pandora Papers". Pero todo esto tiene un común denominador, las instituciones reguladoras y fiscalizadoras, ya sea Controlaría, SII, CMF y Fiscalías se han vuelto perezosas o poco prolijas, descansando en los mitos, y además se evidencia la falta de independencia que finalmente no las deja actuar.

La desconfianza de la ciudadanía surge porque cada vez que entregamos la confianza en ese hombre o mujer, nuevo y virtuoso, nos encontramos traicionados con escándalos, historias a medias o con dioses con pies de barro, por tal motivo, las instituciones deben ser fortalecidas y también vigiladas par que cumplan con su función.

En estos días, se comenzó a escribir nuestro nuevo pacto social, por lo que debemos tener especial atención en que las nuevas o antiguas instituciones fiscalizadoras y reguladoras tengan la capacidad y la independencia que las faculte para indagar, investigar y querellarse contra todos los ciudadanos, dentro de la ley y las normas, para proteger la institucionalidad que finalmente se construye entre todos, pues falta que estas nuevas instituciones y sus facultades estén escritas en blanco y negro y, además, construidas en piedra.

Desde Facebook:

Guía de uso: Este es un espacio de libertad y por ello te pedimos aprovecharlo, para que tu opinión forme parte del debate público que día a día se da en la red. Esperamos que tus comentarios se den en un ánimo de sana convivencia y respeto, y nos reservamos el derecho de eliminar el contenido que consideremos no apropiado