Crisis en transporte fuera de Santiago

Juan Irarrázaval

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Lo que verdaderamente afecta el bolsillo de los chilenos es la ineficiencia del negociado del Transantiago, llamado RED desde principios de 2019, pero que sabemos es el mismo sistema que partió fracasadamente y con miles de problemas el 2002, con el futbolista Iván Zamorano como rostro publicitario.

Son miles de millones de pesos -sin más, el equivalente al 70% de lo que se pretende recaudar con la reforma tributaria- que se pierden periódicamente en este sistema de transporte, en desmedro de otras necesidades de las familias chilenas. En este contexto, el Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones (MTT) destinó un aumento de 72% para la inversión en el sistema Red Movilidad, pasando de $28.445 millones zanjados en 2022 a $48.912 millones para 2023. Esta es una de las carteras que presenta mayor crecimiento presupuestario dentro de la actual administración con un incremento de 26,4% y montos por $1,5 billones.

En menoscabo, por ejemplo, del transporte rural que hoy vive una crisis terminal, luego de haber lidiado no sólo con el estallido de violencia, la pandemia y el incierto panorama económico actual, sino que también con una falta de apoyo y el hostigamiento histórico y permanente por parte del Estado, con hiper regulaciones ridículas que lo hacen insostenible y que pretenden profundizar ahora en la misma ley de fondos de Transantiago, con la extensión de los bienes afectos y el administrador provisional. Lo que quieren es que el sistema colapse para estatizarlo haciendo nuevos Transantiago a nivel provincial y regional.

Si quieren compensar las tarifas, lo que deben hacer es dar una exención en el impuesto específico al transporte de pasajeros, tal como la tiene el transporte de carga que realizan los camioneros. El transporte de carga mueve la economía, el transporte público mueve a las personas, a los chilenos, que son mucho más importantes.

Cabe resaltar que en 2021 el Sistema de Transporte Público Metropolitano trasladó en promedio a 3,8 millones de personas al mes, lo que representa un alza de 20,3% respecto al año 2020. En relación con los viajes, en el transporte público en la capital se registraron más de 527 millones de viajes, cifra que representa 33% más que en 2020, por la época más dura y restrictiva de la pandemia, pero 49% más bajo que 2019 (considerando este año con mayor cantidad de viajes después de 2018).

Es necesario entregar una solución urgente a más de 1 millón de personas que viven en las zonas rurales de la RM, quienes hoy viven una verdadera pesadilla con el transporte público. Es hora de que se comprenda que Santiago no es Chile.