Gasto público y pérdidas en Ferrocarriles

Es importante seguir discutiendo medidas para contener el gasto público y aliviar la estrechez fiscal que enfrenta el Estado. Revisar la pertinencia de estos gastos es fundamental, ya que reducir recursos en servicios públicos esenciales puede afectar la calidad de vida de quienes tienen menos. Por eso, es clave evaluar la eficiencia, transparencia y utilidad de los gastos públicos, especialmente en sectores estratégicos como el transporte, para promover el crecimiento y mejorar el bienestar social.

En transporte, el Estado destina aproximadamente $1.466.629 millones anuales en subsidios en todo el país, unos USD 1.150 millones (dtpr.cl, 2024). Entre 2022 y 2024, esta cifra aumentó 46%, unos $458.819 millones (USD 483 millones). Este incremento en solo dos años requiere una justificación sólida, ya que implica un aumento significativo del gasto público que debe ser cuidadosamente analizado.

A esto se suma la evasión en el sistema Transantiago, que alcanza 38,2%, generando pérdidas por unos $310.000 millones anuales (USD 330 millones). En regiones, también con sistemas subsidiados, la evasión no supera el 3-4%.

Por otro lado, la Empresa de los Ferrocarriles del Estado (EFE), entre 2020 y 2024, presenta pérdidas acumuladas de $707.383 millones (cmf.cl). En estos cinco años, alcanzó una pérdida promedio anual de $141.476 millones (USD 149 millones). Estas pérdidas son cubiertas por gastos públicos desde el Estado. Solo en 2024, EFE perdió $174.992 millones, un aumento de 71% respecto al año anterior. Desde 2020, ha tenido un incremento en pasajeros transportados (+168%) y en ingresos (+91%), pero también un aumento en las pérdidas del 146%. Paradójicamente, en ese mismo período, aumentó su dotación en 607 personas, (+36%) principalmente destinadas a las oficinas centrales (EFE Matriz), con alzas en el gasto de personal de 88%, mientras y paralelamente, redujo en 50% el gasto en mantención por pasajero. Anotemos que el personal que trabaja en los proyectos (Melipilla y otros) no está considerado en las cifras indicadas (no son empleados aun).

El 2024 fue un año difícil para Ferrocarriles, marcado por un choque frontal de trenes, la muerte de dos trabajadores, heridos graves y la destrucción de un tren recién adquirido. La acumulación de pérdidas por muchos años ha llevado a que EFE tenga patrimonio negativo, es decir, sus deudas superan ampliamente sus activos y capital propio. La única razón por la cual puede seguir operando es gracias a los aportes financieros y el respaldo directo del Estado.

Tanto EFE como Metro pierden millones de dólares anualmente (USD 149 millones y USD 345 millones, respectivamente). Ambas empresas, peligrosamente, han reducido gastos en mantención y aumentado significativamente sus gastos en personal. Aunque justifican sus operaciones en los valiosos beneficios sociales que aportan (ahorros de tiempo), no generan ganancias económicas. Por ello, sus inversiones, sus gastos y su gestión deben ser sometidas a un control riguroso, asegurando pertinencia y un análisis exhaustivo del costo-beneficio. Lo valioso de sus servicios no debe encubrir ineficiencias, gastos inapropiados y aumentos sin fin en las pérdidas que el Estado debe asumir.

El uso de recursos públicos requiere primero transparencia en la información, segundo un análisis detallado del valor social y económico de estos servicios, y tercero un control estricto de su gestión operacional y financiera. Las organizaciones encargadas del control de estas empresas del Estado (Dirección de Presupuestos-Dipres y Sistema de Empresas Públicas-SEP) requieren disponer de competencias en el sector transportes, de capacidades para generar el debido valor estratégico y también para realizar un control económico-financiero efectivo.

Desde Facebook:

Guía de uso: Este es un espacio de libertad y por ello te pedimos aprovecharlo, para que tu opinión forme parte del debate público que día a día se da en la red. Esperamos que tus comentarios se den en un ánimo de sana convivencia y respeto, y nos reservamos el derecho de eliminar el contenido que consideremos no apropiado