En nuestro país es habitual deshacerse de patrimonios importantes y por distintas circunstancias ya sean sociales, políticas o de infraestructura. No existe la prevención de cuidar los espacios públicos que han sido declarados monumentos nacionales. Uno de los emblemáticos es la ciudad de Valparaíso que es Monumento de la Humanidad. Casi la mitad del casco histórico del puerto se ha destruido por los incendios y sigue ocurriendo y nadie repara en aquello.
Y como es una política, a todo nivel, no cuidar nuestro patrimonio histórico, ahora estamos asistiendo a la muerte de un gigante de nuestra historia como es el edificio Gabriela Mistral, que nació en el gobierno de la Unidad Popular por decisión del Presidente Salvador Allende, que fue conocido como el edificio de la Unctad ya que ahí se realizó la Tercera Conferencia Mundial de Comercio y Desarrollo. Fue inaugurado el 3 de abril de 1972. Posteriormente se le entregó al ministerio de Educación que lo rebautizó como Centro Cultural Gabriela Mistral.
Cuando vino el golpe militar, destruida La Moneda, la Junta de Gobierno militar se instaló en este edificio. Tras varios años y cuando el palacio presidencial estuvo listo se trasladaron y quedó allí funcionando el ministerio de Defensa. Luego, durante el primer gobierno de Sebastián Piñera volvió a su nombre original Gabriela Mistral y pasó a ser un Centro Cultural y Social.
Más adelante pasó a ser autónomo y con gran despliegue artístico, obras de teatro, presentaciones folclóricas y de otro tipo también. Hoy parte de este edificio comienza a vivir sus últimos días por decisión de las nuevas autoridades de gobierno.
Sin duda que muchas cosas acontecieron en esta edificación. Cosas tan importantes como los comedores donde todos los estudiantes que quisieran podían almorzar gratis antes del Golpe Militar. Posteriormente, en el recinto trabajó la Comisión Valech entre otros.
Posterior al incendio del centro de evento y terremoto del 2010 el MOPP declaro inhabitable las oficinas del edificio donde funcionaba el ministerio de Defensa, hace unas semanas hemos escuchado la voz del ministro de Bienes Nacionales Felipe Ward, quien insistió que el edificio estaba inhabitable, por problemas estructurales, eléctricos y otros. El Estado de Chile ha hecho esfuerzos para recuperar edificios con historia como es el Palacio Pereira donde funcionara dependencias del ministerio de Cultura y turismo por lo cual el Estado puede y debe hacer otro esfuerzo para que edificios como el Gabriela Mistral no mueran y puedan seguir albergando oficinas públicas al servicio de la comunidad como fuera pensado por sus creadores.
Para los arquitectos que participaron en esta obra sigue siendo la más inspiradora porque quienes lo construyeron pusieron su corazón, voluntad y compromiso con la Patria, algo que “no tiene precio” a juicio de sus creadores. Ellos aún esperan que se recapacite y se entreguen los recursos para restaurarlo porque si no es así quiere decir que no hay interés por salvar un patrimonio de nuestra historia. “Es una joya por su historia. Ese es un valor”, dicen los arquitectos.
También es una obra jamás hecha con el nivel de compromiso que se hizo porque era casi imposible ejecutar en tan poco tiempo un proyecto como este, que ya cumplió 43 años, se trabajó día y noche sin descanso para que Chile pudiera recibir a quienes venían a participar a un encuentro mundial de la ONU.
La Fundación Santiago Nuestro y Ciudadano iniciará una campaña para que las nuevas autoridades hagan los esfuerzos para que la voragine inmobiliaria no haga desaparecer un edificio emblemático que en sus paredes guarda parte de nuestra historia.
Chile debe conservar sus antiguos edificios o no tendremos historia que contar para las nuevas generaciones.
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