Juan Gabriel y las AFP
Tú muerte repentina removió las emociones latinas que viven a través de tus canciones.
Los noticieros y la televisión rindió homenaje a tu talento. Hemos seguido y disfrutado tus momentos creativos de música popular que han llenado nuestros oídos de melodías de origen mexicano. Ya son nuestras, son de todos, son del mundo.
En nuestro país la música mexicana popular la consideramos como propia, es parte de nuestra identidad, sobretodo en el mundo del campo y en las comunas de las grandes ciudades.
Además de reconocer tu talento, agradezco el escuchar de las voces de periodistas y comunicadores al reconocer tu historia en el día de tu muerte que "eras un joven a tus 66 años."
Gracias Juan Gabriel.
¡Oh paradoja! Si a los 60 somos adultos mayores o de la tercera edad como decíamos ayer,para la marcha de No más AFP hoy, a raíz de tu muerte, somos jóvenes desde los 60.
Me llama la atención que espontáneamente desde las comunicaciones seas definido como joven y las otras personas de tu edad sean catalogadas como viejos.
Hay algo más que la música que nos rejuvenece, y es la posibilidad de vivir más años que nos ha dado la ciencia.
Esa contradicción en la percepción comunicacional, nos habla de la misma contradicción a nivel cultural de nuestra sociedad.
Gracias Juan Gabriel.
Pienso que si nos detenemos a observar esta paradoja entre ser joven y viejo después de los 60 años, podremos abrir nuestras mentes para modificar el sistema de pensiones en Chile, haciéndolo más justo, equitativo y coherente con la vida de hoy.
No pongamos límites, liberemos el marco normativo del pasado, creemos uno nuevo que reconozca a los jóvenes de 60 años y se aumente el umbral de nuestra expectativa de vida que llegó para quedarse.
A los jóvenes de más de 66 hay que cuidarlos y entregarles pensiones dignas. Eso no está en cuestión. En la discusión que se nos viene, no podemos negar la posibilidad de aumentar la edad de jubilación para responder adecuadamente a mayor equidad y justicia social.
Atrevámonos a poner sobre la mesa, todas las propuestas de los expertos sin censuras políticas ni de derecha ni de izquierda. Se deben recoger los elementos que lleven a obtener el financiamiento necesario para una distribución que llegue en igualdad de condiciones a los trabajadores y trabajadoras de nuestro país que llegan a su etapa de merecido descanso.
Chile necesita un sistema de previsión y seguridad social de acuerdo a nuestros tiempos, que garantice los derechos económicos, sociales y culturales.
Gracias Juan Gabriel, por el ejercicio de reflexión.
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