A raíz de la convocatoria de la Red Chilena contra la Violencia, para manifestarse contra el impactante número de femicidios que ya llegan a 11 a tres meses del inicio del 2016, un grupo de 50 mujeres se reunieron frente a La Moneda, hace unos días. La razón de hacerlo allí fue debido a una portada de Las Últimas Noticias que tituló “El Amor y los Celos La Mataron”,a raíz del descuartizamiento sufrido por una joven mujer colombiana, asesinada por su pareja y que había llegado a Chile hace solo cuatro meses- que constituye una interpretación antojadiza y machista, confundiendo el amor con un horrendo femicidio.
La protesta pacífica de tenderse en el suelo y simular cuerpos inertes, generó una desmedida acción de Carabineros contra las manifestantes, llegando con un carro lanza-aguas, injuriándolas con frases completamente descalificadoras, mojándolas, golpeándolas, para finalmente llevarse detenidas a 9 mujeres, a quienes mantuvieron en la cárcel durante toda una tarde. Hechos de esa naturaleza no pueden ser aceptados en una sociedad democrática.
En ese contexto, manifesté que he solicitado antecedentes a la Subsecretaría del Interior, -secundando lo propuesto por la Ministra del SERNAM- y condené esta excesiva violencia. Es intolerable que llevemos tantas mujeres asesinadas por la violencia de sus parejas, en estos tres primeros meses de este año. O que un medio exprese un lenguaje machista, confundiendo celos malsanos y fatales con amor verdadero. Y menos que Carabineros tenga una conducta inapropiada contra un grupo de mujeres que se expresaron pacíficamente.
¿Por qué esta manifestación, aparte del titular? Porque mientras los hombres son la mayoría de las víctimas de homicidios y lesiones,muchas de éstas en contexto de riña, las mujeres son la mayoría de las víctimas de delitos sexuales y violencia intrafamiliar, formas de violencia en que el agresor es, habitualmente, una persona conocida, cercana o que forma parte de su ámbito familiar o de confianza.
Tal como lo hemos sabido hace mucho tiempo, las víctimas de violencia intrafamiliar y de delitos sexuales denuncian en baja proporción, y ahora, de acuerdo a estudios vigentes, nos informamos que 3 de cada 4 delitos y agresiones no son denunciados. Es decir, tenemos un 75% de agresores que viven impunemente delinquiendo, protegidos por sus propias víctimas.
De acuerdo a datos del ministerio del Interior y Seguridad Pública, los femicidios aumentaron, entre 2012 y 2015, en un 32%, lo que representan prácticamente el asesinato de una mujer cada mes.
Respecto a las denuncias por femicidio, el año 2012, 1 de cada 2 de ellas, habían interpuesto, previamente denuncias por violencia intrafamiliar, pero más de la mitad de estas causas terminaron archivadas, principalmente porque las propias mujeres se retractaron, dando cuenta de una típica dinámica en la violencia de género, en que la víctima vuelve a creer en su victimario, y lamentablemente termina muerta en manos de éste.
Además, si consideramos un informe de la Dirección de Presupuesto del ministerio de Hacienda (DIPRES) sobre el Programa de Apoyo, a nivel nacional, sabemos que se producen más de medio millón de casos de éstos delitos, es decir, aproximadamente 1 cada 20 mujeres o niñas sufren este flagelo de la violencia de género.
No podemos seguir esperando que se asesine a una mujer por mes en Chile para reaccionar: solicitaré al gobierno la conformación de una comisión especial que trate la violencia contra la mujer, y en especial, el aumento de femicidios.
El amor de pareja no tiene nada que ver con la agresión sicológica, ni física, y menos con la violencia sexual y el femicidio, y eso nos debe quedar a todas y todos definitivamente claro. Las mujeres violentadas no pueden seguir siendo asesinadas.
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