Se ha discutido mucho sobre la necesidad de internacionalizar los emprendimientos. A los grandes como Cornershop y NotCo, que son algunos de los casos chilenos recientes que han logrado dar el salto, se han ido sumando también pequeños y medianos como IwanaCash. Y es que en ese aspecto pensar en términos globales y no solo a nivel local (o Latinoamericano) resulta clave, para el éxito de las empresas exportadoras en Chile.
Así lo demuestra un estudio que elaboramos junto al académico Juan Carlos Salazar de la Universidad Autónoma de Madrid, en el que analizando el crecimiento de las ventas de los PYMES, según los datos de Corfo en Chile, encontramos que cuando los emprendimientos operan fuera del país, aquellos que muestran mayor éxito no son los que se sitúan en mercados de Latinoamérica, sino que los que se establecen en mercados lejanos, como Estados Unidos, Europa y Asia.
En términos de venta, competir en la región es más difícil, debido a que la oferta de productos chilenos es similar a la de empresas de países vecinos. Por el contrario, nuestras compañías compiten con productos muy distintos en mercados lejanos. De esta manera, se paga más por ellos. Por lo tanto, exportar a estos países tiene un mayor valor para las empresas, permitiéndoles más éxito.
Es por ello que resulta fundamental que programas de fomento al emprendimiento, como aquellos que proporciona CORFO apoyen a emprendedores a pensar en generar y establecer sus negocios a nivel global y no a nivel local (regional).
Una manera que tengan más conocimiento sobre esto, se da a través de una mayor difusión que pueden generar estos programas sobre las características de los tratados de libre comercio, enseñar sobre las medidas arancelarias y paraarancelarias existentes entre mercados y llevar a estos destinos misiones con emprendedores, para que conozcan estos mercados internacionales. En este ámbito, la labor que puede realizar ProChile resulta clave.
Sumado a ello, no se trata solo que estos programas incentiven un cambio de mentalidad, sino que apoyen con distintas acciones, que consideren la generación de redes de contacto, asistencia técnica, como traductores, y ayudas en ferias internacionales, entre otras, para que conozcan en profundidad los mercados lejanos y así puedan operar de mejor manera.
En los próximos años, los mercados asiáticos serán los referentes en el mundo. Y si bien es cierto, hoy en día el inglés es un idioma muy extendido en Estados Unidos y Europa, lo es en menor medida en Asia, por lo que es muy importante la preparación y acercar a los jóvenes y profesionales a idiomas como el chino, japonés, coreano; además de conocer sus tradiciones, prácticas de negocios y funcionamiento general de estos mercados.
Los programas de promoción productiva deben encargarse de canalizar esfuerzos para que los emprendedores visualicen oportunidades de crecimiento en los mercados internacionales más importantes, y, de ese modo, fomentar que más emprendimientos puedan dar el salto.
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