Los eventos climáticos extremos se han vuelto cada vez más recurrentes y prolongados, por lo que sus efectos se vuelven mucho más severos. Desde el pasado verano, con una serie de incendios forestales, que devastaron grandes extensiones de bosques, hasta las intensas precipitaciones y desbordes de ríos que afectan actualmente la zona central de Chile, se impactan y degradan ecosistemas con alto valor social, económico y biológico.
Los incendios fueron controlados, sin embargo, frente al escenario de cambio climático, sumados a los patrones de precipitaciones durante eventos como el fenómeno del Niño, que indican altas probabilidades de intensas lluvias sobre suelos sin protección vegetativa durante los meses de invierno, se genera un escenario aún más vulnerable para los ecosistemas y actividades productivas. En este sentido, el Plan Nacional de Restauración a Escala de Paisaje y el Proyecto de Restauración de Paisajes son iniciativas que se tornan indispensables para recuperar y proteger las funciones de los denominados servicios ecosistémicos.
Entonces, resulta fundamental conectar estas acciones de corto plazo con acciones de mediano y largo plazo. Es en esta línea donde el proyecto, financiado por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF), inserto en el plan nacional, busca impulsar la recuperación de paisajes degradados, mediante la integración de diversas actividades económicas y con la participación de diferentes actores.
En este sentido, el Proyecto GEF de Restauración de Paisajes tiene un enfoque multidimensional para la recuperación y protección de la biodiversidad. Pero también tiene otros beneficios potenciales, como ayudar a la restauración de hábitats para especies amenazadas o en peligro de extinción; la recuperación de suelos degradados; mejorar la seguridad alimentaria; puede proporcionar empleos y oportunidades de subsistencia a las comunidades locales; proteger y recuperar el suministro hídrico, y contribuir a mitigar el impacto del cambio climático, mediante la captura de carbono.
Chile, en línea con los compromisos internacionales de conservación de la biodiversidad, trabaja en la promoción de la restauración de paisajes, asumiendo que los ecosistemas son el sustento de la vida humana. El Proyecto GEF Restauración de Paisajes es liderado por el Ministerio del Medio Ambiente (MMA) y la Corporación Nacional Forestal (Conaf), financiado por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por su sigla en inglés) e implementado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El éxito del proyecto requiere de un enfoque interdisciplinario que involucre a varias partes interesadas, incluidos los encargados de formular políticas públicas, los científicos, los administradores de tierras y las comunidades locales. Lograr restaurar nuestros paisajes depende, sin duda, de un financiamiento sostenible, pero también de programas integrales que cuenten con elementos de monitoreo efectivo y eficiente, que consideren prevención de amenazas, como incendios forestales o lluvias intensas y que, además, fomenten la producción sustentable de los sectores agropecuario, forestal y minero. El Proyecto Restauración de Paisajes busca el restablecimiento de la integridad ecológica y la mejora del bienestar humano, iniciativa que requiere una planificación y ejecución precisa, el involucramiento y participación activa de los actores territoriales, así como también un indispensable y fuerte compromiso político y financiero.
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