El IVA y los Municipios

Iván Borcoski

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Cualquier privado "descarga" IVA, es decir, lo recupera haciendo un balance entre la facturación de sus ventas y los gastos incurridos en sus compras. En el caso de las municipalidades, por su carácter público, ésta ecuación no se puede realizar. En efecto, una municipalidad es una corporación autónoma de derecho público con personalidad jurídica y patrimonio propio. 

Las administraciones comunales no facturan, puesto que los servicios que entregan corresponden a beneficios a la comunidad, y diversos programas y prestaciones de servicios sociales.

Los Municipios no puedan recuperar el Impuesto al Valor Agregado que pagan por sus compras y contrataciones de bienes y servicios, porque no pueden trasladarla a nadie, debido a que al encontrase en el final de la cadena, no facturan.

Es decir, no tienen posibilidad de “descargar” el impuesto de sus compras a través del IVA de sus ventas. Esta situación parece bastante difícil de cambiar. 

Entonces nos preguntamos ¿qué pasa con ese importante aporte impositivo que los Municipios hacen al Estado Central?

Una alternativa podría configurarse mediante la elaboración de un proyecto de ley que modifique los componentes de ingreso del FCM, acordando un porcentaje de recuperación de ese IVA que sería inyectado por el Estado Central al Fondo Común Municipal, fondo redistributivo del que depende cerca del 75% de los Municipios chilenos, que permitiría que se beneficiaran de ese IVA, las compras que se aportan al tesoro público en beneficio de todo el país. 

De esta manera se generaría un importante flujo de ingresos para enfrentar las alicaídas finanzas municipales producidas, en gran parte, por la entrega de nuevas tareas por parte del Ejecutivo sin el debido y considerado financiamiento.

Así, las municipalidades podrían contar con una nueva herramienta generadora de ingresos propios para disponer de mayores recursos en la ejecución de los nuevos proyectos de inversión comunal y de servicios para la comunidad.