Guía rápida para ser un corrupto exitoso

Lucio Cañete Arratia

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Dado que ser corrupto en Chile es un excelente negocio, mucho más rentable que seguir aquellas labores que se encauzan por la aburrida senda de la limpia meritocracia, aquí te presentamos algunos simples y efectivos consejos para que te inicies sin mayores tropiezos en el lucrativo arte de traicionar la confianza del pueblo. Este decálogo contiene indicaciones que te pedimos para tu propio beneficio, las sigas al pie de la letra antes, durante y después de tus actos corruptos.

1. Teje redes. Tú no eres el único aspirante a corrupto en el país, de hecho existen varios. Alíate con ellos y con los ya consolidados. Integra fuertes y extensas redes de cooperación que alcancen al Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Preferencia a los potentados de la política partidista y del gran empresariado, aunque es probable que mates tres patos de un tiro pues aquí en Chile son muchos los que a la vez son políticos, empresarios y corruptos
2. Posiciónate en debilidades. Así como no existe el crimen perfecto, tampoco existe la probidad perfecta. Por eso debes examinar tu entorno e identificar en él las fisuras, grietas y en general cualquier debilidad que toda organización posee. Instálate en esos espacios débiles y como todo sucio insecto, desde ahí comienza a putrefactar la preciada fruta
3. Identifica a los héroes. Individualiza y hazle seguimiento a periodistas, académicos, artistas, deportistas, filósofos y otros que intransigentemente están en campaña contra la corrupción. Escóndete de estos perros de presa pues si sospechan de ti, te harán la vida imposible. Puesto que en Chile dichos héroes son poquísimos, no te será difícil evadirlos
4. Baila con ángeles. Muéstrate como un abnegado padre o madre, como el mejor de los amigos, como el más responsable trabajador. Mientras más bondad irradies, menos sospecharán de ti. Exhíbete siempre firme al lado del bien y en contra del mal. Si sale a la luz pública un caso de corrupción, pide indignado una pena ejemplar "caiga quien caiga"
5. Víctima de conspiración. Si eres tú quien es pillado flagrantemente en fechorías, argumenta que se trata de un complot o algo parecido para destruir tu reputación. Que se trata de una campaña orquestada por aquella compañera de kínder a quien le negaste un beso y ahora toma represalias
6. Lo tuyo fue un error. Si no resulta lo anterior, di que fue una equivocación tuya, un tropiezo que cometiste en un mal momento, algo propio de la naturaleza humana propiciada por el sistema. Por último recuérdales a los que te descubrieron que lo que tú hiciste ya lo venían realizando varios y que todos podemos cometer errores cuando no queda alternativa, así que apliquen "razones de Estado" para olvidarlo
7. Encuentra "yayitas". Si alguno de los héroes o heroínas anti-corrupción te acusa, muestra públicamente alguna caída que hayan tenido. La gracia es desacreditar a quien denuncia. Si no encuentras algún reprochable episodio durante su historia, inventa uno. Cuenta por ejemplo que se quedó con el vuelto que le dieron de más cuando fue a comprar pan al almacén de la esquina o que en la escuela pública intentó coimear al profesor jefe con una manzana
8. Dosifica tus gastos. Mientras estés robando, sé discreto en tus adquisiciones para no levantar sospechas. Si de manera irresistible compras a tu nombre un flamante Audi, alega que por austeridad lo preferiste en desmedro del Lamborghini de tus sueños y que para ello debiste romper tu chanchito gastando los ahorros de toda una vida. Muchos te creerán y calificarán a tus detractores de "envidiosos"
9. Perfeccionamiento continúo. Siempre debes estar tecnológicamente un paso adelante de jueces honestos, fiscales implacables y policías íntegros. Para mantener esta ventaja debes conocer mejor que ellos el funcionamiento de las telecomunicaciones y la informática. Manejar estas tecnologías y otras útiles para no ser alcanzado por las fuerzas de la probidad requiere saber de electromagnetismo, óptica e incluso termodinámica. Si en tu etapa de colegio fuiste el porro en la asignatura de Física, ahora es el momento de ponerte al día
10. Activa fusibles. Si te pillan siendo parte de alguna cofradía, entrega de ella a los más debiluchos. Deja que la sociedad se distraiga con ellos para así liberarte de castigos. El sistema persecutor chileno tiene un déficit atencional crónico y le cuesta atrapar a varios miembros de una red de corrupción de manera simultánea. Así que con que se encarcele a un par, ya será visto como toda una hazaña. Sacrifica entonces de los tuyos a los más feos y pobres, ellos serán carnada fácil