La otra cara de la Araucanía ¿quién se hace cargo?

El último indicador de actividad económica regional del 2015 trajo una buena noticia para la Región de la Araucanía, situándola como la tercera región que más creció durante el año con un 4,8%, debido a la expansión de la construcción habitacional impulsada por la entrada en vigencia del IVA a las viviendas nuevas.

Sin embargo, este crecimiento no parece llegar a todos, ya que según la última encuesta Casen, un 27,9% de habitantes de esta región están en situación de pobreza, cifra que la deja -por lejos- como la más pobre del país.

Por otro lado, la seguidilla de atentados que ha sufrido la zona en los últimos meses por grupos infiltrados, que en ningún caso representan al pueblo mapuche, provocan que este escenario empeore, aumentando los desincentivos para que llegue más inversión a la zona.

Es más, lo que está provocando este clima de profunda violencia, es claramente el éxodo de pequeños y medianos empresarios que no logran soportar las pérdidas millonarias, producto de los graves atentados, generando un problema de desinversión en la zona

La gran pregunta es ¿quién se hace cargo? La respuesta posible es el Estado.Justamente lo que ha faltado durante los últimos años, debido al profundo abandono por parte de las autoridades.

La incapacidad de perseguir a los violentistas y la falta de voluntad política para lograr un diálogo transversal, enfrentando el tema como una política de Estado, dan cuenta de grandes desafíos pendientes en la solución del conflicto.

Por parte de los gobiernos de turno, ha faltado también dar garantías y condiciones para promover la inversión en la zona, la que hoy existe principalmente por el esfuerzo de las empresas forestales privadas, en vista de que nuevas empresas se instalen en la zona y logren aprovechar su inmenso potencial.

Sectores como el turismo de aventura y etno turismo, además del aprovechamiento agrícola y ganadero de la zona, todavía no están completamente desarrollados, lo que, de realizarse,  otorgaría grandes beneficios para el desarrollo económico y social de la región, disminuyendo los altos niveles de pobreza y desempleo, principalmente, de los pueblos más aislados.

También se requiere una mayor inversión pública con el mejoramiento de más caminos que aumentan la productividad y faciliten el monitoreo de seguridad que se realiza en la zona, además de la instalación de más servicios públicos, que hoy principalmente se encuentran en Temuco.

Probablemente la extinción de los violentos sucesos se demore en apagarse, pero no por eso debemos seguir dejando postergados a miles de compatriotas que no se merecen la miseria en la cual están viviendo por causa de autoridades que no le han tomado el peso al tema, y que han preferido evitarlo, por los “costos políticos” que muchas veces causa este conflicto.

La región de la Araucanía y su pueblo se merecen un mejor desarrollo, rescatando las tradiciones culturales de la mayor etnia de Chile, dándole oportunidades a su población y permitiendo que el progreso logrado en otras regiones del país también llegue a esta zona.

Desde Facebook:

Guía de uso: Este es un espacio de libertad y por ello te pedimos aprovecharlo, para que tu opinión forme parte del debate público que día a día se da en la red. Esperamos que tus comentarios se den en un ánimo de sana convivencia y respeto, y nos reservamos el derecho de eliminar el contenido que consideremos no apropiado