La Selección de fútbol y la Presidencia de Chile

Mira abuela. La Beatriz Sánchez es candidata Presidencial por Revolución Democrática.

Ni se inmutó. Luego me miró y me dijo: me cae bien ella, encuentro que es una mujer con sentido común y apasionada por lo que hace. La recuerdo en el programa de noticias de la Red junto a Alejandro Guillier. Yo encontraba muy bueno ese programa.

Esperé unos instantes para ver si me comentaba algo sobre su candidatura presidencial. Mi abuela siempre ha estado interesada por esto de "quien gobierna el país". La espera fue inútil. Siguió tomando su desayuno como si nada.

Ya me preparaba a partir cuando me lanzó una preguntita, ¿qué te parece el actual entrenador de la Selección Nacional?  En los próximos días debemos jugar contra Argentina y Venezuela.

Yo, pensando que era una pregunta inocente le contesté, me parece bien, aún cuando más me gustaba Sampaoli, y mucho más Bielsa.

Se sonrió y me dijo, casi todos en esta familia son aficionados a la "dirección técnica del fútbol". ¿Tú crees que podrías dirigir la selección nacional de fútbol?

Abuela es cierto que somos futboleros, pero no creo que me contraten para dirigir la selección nacional de fútbol. Yo me dedico a otra cosa. Nunca he dirigido un equipo de fútbol y sólo asisto a los estadios como espectador e hincha. No quiero imaginar el resultado de mi posible incursión en ese ámbito. 

A ver a ver, ¿me estás diciendo que no cualquiera puede dirigir la selección nacional de fútbol? ¿Cuáles son las características que tú como hincha pedirías a ese entrenador?

Abuela, me parece evidente. La contratación de alguien sin formación específica en entrenamiento de fútbol, sin una carrera previa en la dirección de equipos de primera división, ojalá con roce internacional en Copa Libertadores u otros campeonatos exigentes, me parecería una irresponsabilidad.

Se sonrió y luego me dijo, está bien. Es evidente que tú no estás capacitado para dirigir la selección nacional de fútbol. Pero ¿qué tal un comentarista deportivo? Yo siempre escucho a Pedro Carcuro y me parece un tipo razonable. O ese joven Solabarrieta, que es tan apasionado en sus relatos. ¿Ellos podrían ser una buena opción?

Abuela, perdóname insistir, lo mejor para dirigir la selección nacional es un entrenador de fútbol con experiencia en esa labor.

Se sonrió, y me pareció que me estaba llevando hacia una "trampa", algo tan típico en ella.

Dime querido nieto, ¿qué hacemos si los entrenadores posibles son amigos de Jadue? ¿No te parece que eso ya es suficiente para elegir a alguien diferente? ¿A uno que venga de "otro ambiente"? Tal vez un camarógrafo del canal del fútbol  o un dirigente de una sociedad anónima como "Blanco y Negro".

No abuela. La selección nacional de fútbol es algo muy importante. No sería razonable algo como lo que tú propones. Hay profesionales disponibles con menos trayectoria que Bielsa y Sampaoli, de hecho Pizzi ha sido un buen entrenador. Lo que tú planteas es una irresponsabilidad. Ya me imagino lo que ocurriría si te hicieran caso.

Bueno, ¿me puedes contestar cómo es posible entonces que lo que resulta tan obvio para dirigir la selección nacional no lo sea para dirigir el país? Si bien la tesis de que "es alentador que cualquier chilena o chileno pueda aspirar a ser presidente o presidenta" me resulta cercana, estoy convencida que es necesario haber demostrado ciertas competencias en procesos afines.

Abuela, me sorprendes. No puedo dejar de encontrar que tienes un punto. Pero me puedes contestar ¿por qué a tu juicio ocurre esto? ¿Cuál es la razón para que los requisitos solicitados por la hinchada para dirigir a la selección nacional sean más exigentes que los planteados para dirigir el país?

Los candidatos para dirigir la selección pueden ser muchos y eso no significa que sean elegidos, me respondió. 

Está bien abuela. Pero, ¿no te parece que la ciudadanía es más laxa cuando analiza quién puede dirigir al país en comparación a lo estricta que es cuando se trata de la selección nacional de fútbol?

Pensó unos segundos y dijo, mucho me parece que la cercanía de los hinchas con su selección está más fuerte y clara que la de los ciudadanos con el país.

Yo tenía muchas preguntas pero ella se paró y se fue. Sin ninguna consideración a mi  necesidad de sus explicaciones.

Desde la puerta me dijo: al menos tenemos que agregar 3 puntos en esta fecha.

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