El valor del aprendizaje automático, en un mundo imprevisilbe

Edgardo Frías

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Sí, es verdad. El título tiene un error. Quizás, las personas más detallistas lo hayan notado, aunque es posible que otras hayan entendido el sentido de la palabra y lo hayan "corregido" mentalmente de manera automática.

Justamente, hace unas pocas semanas, Jeff Dean, Senior Fellow y SVP de Google Research, contaba que, allá por el año 2001, investigadores de Google se dieron cuenta de que podían usar una técnica poco conocida en esos tiempos, llamada aprendizaje automático -o machine learning-, para ayudar a corregir las búsquedas mal escritas en nuestro buscador. Así, por ejemplo, si alguien ponía en Google "pazatos de baile", el buscador entendía automáticamente que lo que estaba buscando en realidad eran "zapatos de baile" y arrojaba los resultados correspondientes.

Un largo camino, que recién comienza

Largo es el camino que ha recorrido el aprendizaje automático, desde aquellos días en que nuestro buscador comenzaba incipientemente a interpretar las intenciones de una búsqueda, hasta hoy. En todo este tiempo, machine learning fue aplicándose más y más a diferentes aspectos de nuestra vida cotidiana y, entre otras cosas, se hizo fuerte en un terreno clave para el mundo de los negocios, como lo es el del marketing y la publicidad digital.

Hoy, 15 por ciento de las búsquedas que se realizan diariamente en Google son nuevas, es decir que nunca habían sido realizadas antes. En semejante escenario, con procesos de búsqueda y de compra cada vez menos previsibles y más personalizados, automatizar los procesos y utilizar soluciones de marketing basadas en aprendizaje automático es fundamental para poder poner al consumidor en el centro de la escena y ofrecerle la mejor experiencia posible, con un mensaje personalizado, en el momento y en el lugar en el que lo necesita.

Por otra parte, el machine learning no solo es importante para optimizar las inversiones publicitarias y aumentar la rentabilidad final de los negocios. Hace casi una década, un informe de McKinsey ya anunciaba que la automatización podría permitir a casi el 50% de quienes trabajan en marketing liberarse de tareas administrativas para dedicarse a ejecutar estrategias de mayor valor agregado. Hoy la automatización ya no es una opción para las empresas sino una necesidad: 8 de cada 10 ejecutivos y ejecutivas consideran que es fundamental para alcanzar sus objetivos de marketing.

Aquí, en Chile, las principales empresas de retail, finanzas y consumo masivo ya están utilizando la automatización en sus respectivas industrias con excelentes resultados, tanto de ventas como de uso del tiempo de sus equipos. Sin embargo, a pesar de que la automatización ha avanzado muchísimo, estoy convencido de que este es un camino que recién comienza.

Más que un cambio tecnológico, un cambio cultural

En tiempos de nuevos retos, nuevas demandas y nuevos desafíos para las marcas, la automatización de las campañas publicitarias es una aliada invalorable, que puede proyectarnos al futuro y mejorar nuestra vida en el presente.

No se trata, como solemos pensar, de incorporar un cambio tecnológico. Se trata, en realidad, de impulsar un cambio cultural, que nos permita entender el valor de probar, aprender y mejorar, confiando en las ventajas de la inteligencia artificial. Hoy, a través de modelos predictivos, el machine learning ayuda a cientos de organizaciones de nuestro país y de nuestra región a automatizar procesos y a tomar decisiones informadas, en tiempo real, para hacer crecer sus negocios.

Desde Google, estamos trabajando junto a empresas e instituciones de todo Chile para llevar a cada una de ellas las ventajas de una tecnología que es capaz de entendernos, incluso si nos equivocamos al pedírselo. ¿Y tú, ya estás aprovechando las virtudes de la automatización? Si aún no has comenzado, éste es el momento de hacerlo.