Palestina, has sido tú la responsable
Sé que has sufrido mucho por más de 77 años, y que el dolor que sufres desde el 7 de octubre de 2023 no lo logras comprender. Mata tanto los misiles como la indiferencia y silencio de los gobiernos de las democracias liberales del primer mundo. Por ello, he decidido escribir algunas líneas para intentar explicarte las razones por la que te sientes sola en el tránsito hacia tu muerte.
El mundo actual está exultante con nuevas oportunidades de negocios (gas en el Mediterráneo, desarrollo de la IA en territorio ocupado, experimentos de armas y drones entre la población, tren rápido hacia Jerusalén, entre otras oportunidades únicas), y tú, Palestina, eres lo único que se interpone ante el progreso. El mundo postmoderno de las democracias liberales está consiguiendo superar la antigua afición por preguntarse acerca de los cimientos de un orden justo y deshacerse de nostálgicas concepciones que nos mantenían en el subdesarrollo.
En efecto, en los alboreos del transhumanismo, la moral, la política del bien común y el derecho (en especial de los derechos humanos) no pueden ser consideraciones que frenen el desarrollo tecnológico de Occidente.
Palestina, te has convertido en un ente egoísta, ya que insistes en preservar tu existencia a pesar de que el mundo civilizado te ha brindado argumentos razonables para identificarte como ícono de la barbarie. Tus reivindicaciones ancestrales, memoria, derechos a la autodeterminación y libertades resultan anacrónicos y contraproducentes con el devenir económico que la región y el mundo se merecen.
Serían muchos los inversionistas atentos a financiar las fuentes de recursos energéticos situados en tus costas, en la reconstrucción de una Gaza transformada en un resort de lujo como un faro de luz para el mediterráneo, desterrando todo vestigio de lo fuera tu existencia.
En definitiva, los civilizados han querido llevar el progreso -sin ti- a tus tierras, mientras que tú individualismo se ha resistido. Has dejado en evidencia que te has trasformado en un actor irracional y hostil, ya que insistes en la defensa de tus olivos poco rentables, de una lengua poco útil, de tradiciones y una cultura milenaria que resulta añeja. Hoy importan las startup, el desarrollo de la industria militar y el mantenimiento de tu territorio entre amigos, como punto estratégico de control de una zona de bárbaros que progresivamente debieran entrar a la civilización. Estas en el Vía Crucis de tu existencia. Los medios de comunicación social en occidente reproducen casi al unísono la sentencia que te han otorgado los líderes del "mundo libre", los que, por un lado, te acusan de ser un activo promotor de la resistencia y pretender seguir existiendo, y por otro, los indiferentes que esperan las promesas de progreso tras tu inexistencia. Saben que cuentas con unas 60 mil almas menos en Gaza desde el 7 de octubre 2023, por tanto, se deducen que el final está más cerca.
Deberás reconocer, Palestina, que has sido necia al creer que algo tan abstracto como la garantía de protección de la dignidad de la persona podría librarte de tu destino. Eso sí, tu coraje y dignidad no serán posibles de borrar. Ni la IA, ni los poderes fácticos lo conseguirán. Dejarás marcado a fuego que defendisteis los ideales de la humanidad, los que han sido sentenciados a muerte junto contigo.
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