DC y matrimonio igualitario

Juan Ignacio Avendaño

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¿Es contradictorio que un humanista cristiano apoye el matrimonio igualitario? Muchos de quienes defendemos los principios y valores centrados en el respeto a la dignidad de las personas y a sus derechos esenciales, la vida en comunidad, la fraternidad, la trascendental  importancia de la familia y los principios de la democracia, estamos convencidos de que la respuesta es que no es contradictorio, por lo que estamos llamados a apoyar el matrimonio igualitario.

Pero nuestro trabajo también consiste en interpelar, sensibilizar y crear un lenguaje común para los que tienen dudas al respecto, contribuyendo a materializar un cambio cultural.

Para ello, en 2014, bajo el alero del PDC, conformamos la Comisión por la Diversidad Sexual, primera instancia partidaria en Chile en esta materia. Cuando algunos saben de su existencia, preguntan ¿En la DC? y la respuesta es sí, en la DC, un partido que nace como alternativa a los proyectos políticos basados en el materialismo; que siempre se ha declarado progresista y que ha sido impulsor y líder de las principales transformaciones sociales del siglo XX.

Cuando en 1964 se daba a conocer el programa de la "Revolución en libertad", la Democracia Cristiana tuvo la convicción que la promoción popular, la sindicalización campesina y la reforma agraria eran claves para el desarrollo de Chile, pero por sobre todo, eran esenciales para reconocer la dignidad de nuestros compatriotas más postergados.

Hoy, más de 50 años después, podemos decir que esa tarea continúa con nuevo espíritu, pero manteniendo el centro de nuestro pensamiento.  

Al respecto, cabe preguntarnos,  ¿qué conforma hoy nuestra revolución en libertad?

Podemos decir que legislar sobre el matrimonio igualitario es una de las tareas que como humanistas cristianos debemos liderar y que, junto a otras, configuren nuestra renovada revolución en libertad, puesto que su finalidad no es otra que promover y garantizar el respeto por la dignidad de las personas.