Escáner corporal total: ¿Un riesgo para la salud?

Co-escrita con el médico Eugenio Zalaquett, radiólogo

Recientemente el Gobierno emitió un decreto prohibiendo los escáneres de cuerpo completo, utilizados por Gendarmería en la detección de objetos ocultos por personas al ingreso a cárceles. Estos equipos, conocidos en inglés como backscatter scanners y distintos a los usados para diagnóstico clínico en hospitales, utilizan radiación ionizante, y por ello se prohibieron aduciendo potenciales riesgos para la salud, especialmente el desarrollo de cáncer. Una prohibición similar fue implementada en Europa el año 2011, pero no así en los Estados Unidos, donde se utilizan en forma rutinaria para seguridad en los aeropuertos.

El uso de radiación siempre debe considerar un balance entre riesgos y beneficios. Una mamografía expone a radiación, pero previene fallecimientos por cáncer de mama. La necesidad de los escáneres se justifica para poder verificar con facilidad que una persona no porte explosivos en un aeropuerto, o armas al entrar a una cárcel. Proliferaron especialmente después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, producto de la necesidad de detectar bombas o elementos no metálicos que pudieran utilizarse para poner en riesgo la vida de otras personas.

Por otra parte, sabemos que la radiación aumenta en general el riesgo de cáncer. Este riesgo es acumulativo y dosis dependiente. No obstante, existen fuentes naturales de radiación, como la proveniente del sol. De hecho, se estima que un scanner corporal de este tipo expone a una persona a mil veces menos radiación que una radiografía de tórax o a mil veces menos radiación a la que se expone naturalmente en un año. Volar dos minutos en un avión (donde la exposición a radiación natural es mayor que a nivel del mar) implica exponerse a más radiación ionizante que la presente en un escáner de este tipo. Es decir, se trata de una dosis extremadamente baja, que si bien no es cero, parece ser un riesgo aceptable en una ecuación donde hay que proteger la salud no sólo del riesgo de cáncer, sino también del riesgo asociado a la violencia por armas o atentados terroristas.

En ese contexto, la prohibición de estos equipos por parte del Gobierno parece exagerada (y haber revertido esta medida, algo oportuno). No obstante, es importante recordar que existen alternativas a los escáner de radiaciones ionizantes, como el llamado escáner de ondas milimétricas, que emite radiaciones no ionizantes, más similares a ondas emitidas por un microondas, que permite igual capacidad de detección de objetos ocultos, sin exposición a radiación ionizante. Una medida prudente, que considere el balance necesario entre protección a la salud y seguridad, podría ser en el futuro, promover la adopción de este tipo de equipos sin uso de radiación ionizante, como de hecho ha sucedido en Estados Unidos, manteniendo en uso los escáneres que utilizan radiación.

Finalmente, los riesgos a la salud asociados al uso de escáner corporal total resultan mínimos, y estos equipos aportan sin duda a otros aspectos relacionados con la salud también, como la tranquilidad de estar en un lugar seguro, libre de armas u otros elementos peligrosos, factores que al parecer no fueron ponderados adecuadamente al momento de prohibirlos.

Desde Facebook:

Guía de uso: Este es un espacio de libertad y por ello te pedimos aprovecharlo, para que tu opinión forme parte del debate público que día a día se da en la red. Esperamos que tus comentarios se den en un ánimo de sana convivencia y respeto, y nos reservamos el derecho de eliminar el contenido que consideremos no apropiado